Ya pasaron varios días de la culminación del proyecto Tan lejos Tan cerca junto a nuestros amigos españoles y debemos decir que todo fue un éxito gracias a la constancia y esfuerzo lo cual vale resaltar. Debido a la circunstancias y problemas del momento (se declaro emergencia sanitaria en la provincia de Santa Fe, por lo que se suspendieron las clases y hubo que tomar recaudos en las actividades programadas), supimos reorganizar el proyecto y encaminar las actividades para llegar a los objetivos preestablecidos.
El proyecto transcurrió en base al desarrollo de diferentes actividades. Una de las principales actividades fue el trabajó en la mejora del aspecto exterior del hospital del pueblo pintándolo y edificando también la sala de estar del personal de salud.
Luego en lo que respecta al área pedagógica se llevo adelante un periódico encuentro con los niños del comedor del barrio sur durante las tardes. Esta actividad, un poco improvisada, fue una de las más significativas e intensas del proyecto debido a la calidez humana que se construyo a través de los juegos, cantos, risas y bailes entre voluntarios y los “chavales” (como decían los españoles).
También se realizó un taller sobre educación sexual logrando la participación de varios jóvenes y el interés por el conocimiento y cuidado del cuerpo de cada uno y del otro.
Durante algunos días del proyecto se dicto un curso de percusión fabricando instrumentos con elementos reciclados. Es importante decir que los jóvenes participantes asumieron el compromiso de seguir practicando y poder formar una banda.
En el área de cultura los chicos hicieron un gran trabajo entrevistando a diferentes personas de Villa Ana, filmando lugares del pueblo, de la región y el día a día del proyecto y sus entretelones. Ahora quedamos a la espera del montaje del documental para poder darlo a conocer y presentarlo a la comunidad.
La posibilidad que nos ofreció el encuentro de generar de manera conjunta alternativas de solidaridad, de compromiso y de vocación de servicio, en una realidad histórica determinada por una concepción de hombre desligado de todo esfuerzo, y saber que en el viejo mundo existen personas, que de algún modo sienten lo mismo, frente a las diversas carencias de este planeta fortalece aún mas nuestras convicciones y hacen que encaremos la vida de una manera mas entusiasta y optimista.
Como verán fueron días de mucho trabajo y alegría, pero nada hubiera sido posible sin la increíble y admirable entrega y convicción por parte de los voluntarios españoles, que no solamente participaron del proyecto y fueron parte de la organización del mismo, sino que realizaron un gran aporte económico gracias a la búsqueda de fondos en España. Resaltamos y mandamos un gran abrazo a Jessica (voluntaria alemana que participo el año pasado en el proyecto de la escuela del barrio sur), por su dedicación y colaboración para que esto fuera posible.
Es importante también agradecer a la doctora Sonia Cordero y su equipo de salud por todo el esfuerzo y confianza que depositaron en nosotros y en el proyecto, puesto que fue crucial para garantizar el éxito del encuentro.
Como consecuencia de esta magnifica experiencia acordamos seguir trabajando juntos y consolidar una red de cooperación entre ambas organizaciones (Grupo de España y equipo de salud de Villa Ana) con la intención de ir integrando a otros grupos y jóvenes.
Nuevamente les decimos gracias a cada uno de los voluntarios españoles por confiar en nosotros y también a la comunidad de Villa Ana y sus jóvenes, esta experiencia que realizamos juntos tendrá siempre un lugar importante en nuestro crecimiento como grupo y en la historia de nuestra militancia social y le decimos que Villa Ana es su pueblo y siempre los estaremos esperando con mucha regocijo.
A todos nuestros amigos del mundo que siguen de cerca y creen en el proyecto Quebrachito aprovechamos para mandarles un saludo desde Villa Ana y también para decirles que el 3 de agosto comienza el proyecto Subir con Conciencia donde llegarán jóvenes de diferentes países y durante 15 días llevaremos un intenso trabajo en dos escuelas del pueblo. Hasta la próxima.
